Luego de
dos meses viviendo en Paihia, asomaron las ganas de tomar otros rumbos, dejarse
llevar por el viento y descubrir nuevos paisajes.
Dejo atrás
un lugar que me abrió las puertas de par en par y me refugio en un cálido
abrazo durante mi desembarco al otro lado del mundo. Pero para crecer, hay que
salirse de la zona de confort y buscarse en lo desconocido.
Allí voy…
Con la idea
de instalarme en la Isla Sur para buscar mi próximo trabajo, el trayecto hacia
la misma me encontrará con algunos lugares para conocer.
Primera
parada Waiheke Island.
Rara.
Magnética. Hippie Chic.
El aire que
se respira en esa isla me mantuvo inquieta. ¿Cómo describirlo? Hay gente que
llega, se enamora de la isla y se queda a vivir. Me crucé con tres de este
espécimen. Mi caso fue todo lo contrario. Una energía absorbente, una vibra
rara, no me permitieron admirar de tal forma el paisaje. Quienes vieron Lost,
¿podrán entender qué me hizo recordar a esta isla?
Sin más, el
hecho es disfrutar. Y lo hice desde una carpa, sin colchón ni bolsa de dormir,
pero con una sonrisa. Si había que aventurarse a estos nuevos rumbos, heme
aquí!!
Próximos
destinos: Coromandel, Mount Maunganui,
Rotorua, Taupo, New Plythmont, Welligton. Fin de la Isla Norte.
FOTO: El Stress que me genera viajar